Viajar a Nepal, turismo en la cumbre más alta - Panavisión Tours

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Viajar a Nepal, turismo en la cumbre más alta

Un viaje a Nepal le permitirá adentrarse en la zona más elevada del mundo, adornada por sus tradiciones y contrastes

Viajar a Nepal es adentrarse en un país caracterizado por los contrastes. Desde sus elevadas cumbres y sus largas llanuras, hasta sus monasterios budistas armonizando con los templos hindús.

Recorra este destino, y conocerá una región que no permitió la entrada de extranjeros hasta hace menos de ocho décadas. Esta situación ha permitido que aún hoy en día se conserven antiguas tradiciones y costumbres que hacen de un viaje a Nepal una experiencia fascinante.

Una de las zonas de obligada visita es el valle de Kathmandu, uno de los lugares más emblemáticos de Nepal. Visitar este valle supone recorrer las principales localidades del país, entre ellas Kathmandu, la capital.

Pasee tranquilamente por Kathmandu mientras se mezcla con el gentío, los vehículos y los rickshaws, tradicionales carros de origen japonés transportados por hombres. Mire a su alrededor y percibirá todo el encanto de esta ciudad. Fije su mirada y podrá observar sus célebres vacas, consideradas sagradas por ser símbolo de la fecundidad y la maternidad.

Por las calles del centro de la capital encontrará templos, estupas e incluso edificios medievales. Acérquese a la plaza Durbar, catalogada como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, que alberga todo un complejo palaciego con diversos templos que no puede perderse.

Al viajar a Nepal podrá conocer también otras localidades del valle. Bhaktapur es una de ellas y se la conoce por ser uno de los lugares de peregrinación más importantes de todo el país. Allí podrá visitar el Templo de Nyatapala, una impresionante pagoda de cinco pisos considerada todo un ejemplo de arquitectura tradicional nepalí.

Patan, conocida como la ciudad de los templos de los tejados dorados es otro de los platos fuertes de un viaje a Nepal. Aquí encontrará otra plaza Durbar -que no debe confundir con la de Kathmandu-. Visite también Bodnath y Pashupatinah, dos lugares que mantienen viva la esencia tradicional del país.

Por último, no puede abandonar el país sin conocer la cordillera del Himalaya. Esta célebre formación montañosa posee siete de los únicos catorce picos del mundo que superan los 8.000 metros de altitud. Contemple la maravilla de la naturaleza que se presenta ante sus ojos en esta zona, donde montaña y cielo se abrazan en el horizonte. Las impresionantes vistas que obtendrá aquí convierten a esta cordillera en un lugar indescriptible. Observe en todo su esplendor al que es sin duda el rey del lugar, el monte Everest. Si se siente curioso, intente avistar escondido entre las nieves al famoso Yeti, criatura mitológica que se cree que tiene el Himalaya como hogar.

Viajar a Nepal no será una experiencia completa si no realiza un trayecto en avioneta sobrevolando las cumbres del Himalaya. Tan sólo desde aquí podrá comprender la majestuosidad de este lugar único en el mundo y que ha atraído a tantos aventureros a lo largo de la historia.