Templo Abu Simbel, Egipto - Panavisión Tours

Templo de Abu Simbel, Egipto

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Templo Abu Simbel, Egipto

El Templo de Abu Simbel es una de las maravillas del país del Nilo que no puede perderse

El Templo de Abu Simbel, en Egipto, es uno de los lugares más impresionantes de todo el país del Nilo. Consagrado al faraón Ramsés II, este enorme santuario ha conseguido que el nombre del monarca haya perdurado durante más de 3.000 años.

Abu Simbel es un extenso complejo con varios edificios dedicados a los antiguos dioses del país, aunque, sin duda, el más conocido es el Templo de Ramsés, dedicado al faraón divinizado. A día de hoy, igual que hace más de tres milenios, los visitantes siguen asombrándose con este espectacular monumento.

El templo se construyó para celebrar la victoria del faraón en la Batalla de Qadesh frente a los hititas -si bien, los hititas también sostenían que habían ganado la lucha-. Esta batalla es una de las más importantes en la historia, ya que es el primer conflicto de la historia que aparece fielmente documentado y que dio lugar a un tratado de paz entre ambas civilizaciones, que aún hoy se sigue estudiando.

El Templo de Abu Simbel, Egipto, también fue objeto de una de las proezas más increíbles de los últimos tiempos. Con la construcción de la presa de Asuán, la zona del templo iba a quedar sumergida, así que se trasladó todo el complejo, piedra a piedra, hasta una ubicación más segura y se reconstruyó con minucioso detalle.

La fachada del templo de Ramsés de Abu Simbel es una de las estampas más conocidas de Egipto. Custodiando la entrada se encuentran cuatro estatuas sedentes del faraón que superan los 20 metros de altura. Estos colosos fueron tallados directamente en la roca, al igual que el resto del templo, y clavan su mirada pétrea en los visitantes que atraviesan el umbral. Acompañando a las cuatro imágenes del faraón hay otras estatuas de menor tamaño que representan a la familia real y varios rituales sagrados.

Si el exterior del templo le maravillará, el interior le dejará sobrecogido. A medida que cruza las salas y se interna en el santuario, el lugar más sagrado del templo, las habitaciones se empequeñecen y van dando paso a un ambiente sagrado que se palpa en la piel y eriza el vello.

Merece la pena detenerse en la Sala Hipóstila del templo de Abu Simbel. Las enormes columnas están decoradas con impresionantes bajorrelieves que narran las victorias de Ramsés II, con mención especial a la Batalla de Qadesh. De hecho, la imagen de Ramsés persiguiendo a los hititas sobre su carro es uno de los iconos del templo.

Después podrá internarse en el Santuario, el lugar más sagrado del templo de Abu Simbel. Aquí encontrara las estatuas de los dioses más importantes de Egipto: El propio Ramsés divinizado; Ra Hor-Ajti, que mezcla las figuras de Ra y Horus; Amón, el dios principal de Tebas, la capital imperial; y Ptah, el dios del inframundo y la otra vida.

En el santuario se produce una de las grandes maravillas de Abu Simbel. Cada 21 de octubre –el cumpleaños de Ramsés, según los expertos-, los primeros rayos del sol cruzan la puerta custodiada por los colosos, atraviesan todas las salas e iluminan las estatuas del santuario. Todas menos la de Ptah, que por su condición de dios del inframundo, queda en la penumbra. Sin duda un espectáculo impresionante.

Con el traslado del templo, este fenómeno solar se ha modificado, de tal manera que en vez de suceder el 21 de octubre, tiene lugar el 22 del mismo mes.

Además del icónico templo de Ramsés, en Abu Simbel, Egipto, también podrá disfrutar del Ttemplo de Nefertari, la esposa Ramsés. Al igual que el colosal templo de su marido, el de la reina también cuenta con estatuas excavadas en la roca que custodian la entrada. Dos de ellas representan a Nefertari, y otras cuatro a su real esposo.

Este santuario está consagrado a Hathor, la diosa del amor, una divinidad que, tradicionalmente, se ha relacionado con las mujeres. No se pierda detalle de lo impresionante de este edificio, que poco tiene que envidiar al famoso Templo de Ramsés y que supone una maravilla del arte en Egipto.