Dublín
Dublín, Irlanda es una de las ciudades más modernas de Europa. El ambiente moderno de la ciudad se mezcla con los secretos y tesoros que esconde esta linda ciudad irlandesa.
Visitar el Trinity College es una de las cosas más interesantes que hay que hacer en Dublín. Esta es la universidad más antigua de Irlanda. Destaca su preciosa biblioteca, con la ‘Long Room’, un enorme pasillo de 65 metros custodiado por interminables estanterías y soberbios bustos de mármol que albergan más de 200.000 volúmenes.
Otro de los edificios más importantes de la capital de Irlanda es el Palacio de Justicia. Su espléndido pórtico está decorado con seis columnas de estilo corintio y las estatuas de Moisés, la Justicia, la Piedad, la Sabiduría y el Poder.
Por supuesto, la tradición religiosa del país también se palpa en Dublín. Irlanda es una nación con un fuerte sentimiento católico, y prueba de ello es la catedral de St. Patrick, el patrón del país. Destaca en este templo, que es el más grande del país, su linda fachada de estilo gótico. No puede perderse tampoco la Christ Church Cathedral, de origen vikingo, que mezcla en su arquitectura los estilos gótico y románico.
En Graffon Street podrá realizar una de las visitas más curiosas que hay que hacer en Dublín, la estatua de Molly Malone. Esta exuberante pescadera, que por la noche se dedicaba a otros oficios más impúdicos, inspiró la canción tradicional que se ha convertido en el himno no oficial de la ciudad. La canción fue popularizada por una de las bandas más emblemáticas de música de la ciudad The Dubliners.
Si quiere oír alguna de esas canciones, o sumergirse en el ambiente más animado de Dublín, Irlanda, no dude en acercarse hasta Temple Bar, uno de los barrios más animados de la capital. En sus decenas de pubs encontrará un ambiente amable y divertido en el que disfrutar de una buena pinta de cerveza Guiness.
Sin ir más lejos, en la fábrica de cerveza Guinness, la Guinness Storehouse podrá descubrir alguno de los secretos de la cerveza más conocida de Irlanda, cuya fama ha sobrepasado las fronteras. Desde el Gravity Bar, en la azotea del edificio, podrá maravillarse con una de las vistas más lindas de la ciudad, mientras disfruta de una cerveza, una de las mejores actividades que hay que hacer en Dublín.
Por otra parte, en Merrion Square podrá relajarse en medio de un entorno natural en el centro de Dublín. Irlanda muestra aquí su sabor especial, con los clásicos edificios de ladrillos rojos. Además, está rodeado de los edificios más emblemáticos de la ciudad, como el Museo de Historia Natural o la Galería Nacional.
En otro de los parques de Dublín, también encontrará el zoo de Dublín y el monumento Wellington, un obelisco de 62 metros. En las inmediaciones también se emplaza la torre medieval del Castillo de Ashtown.
En el centro de la ciudad encontrará también el Castillo de Dublín. Esta fortaleza ha sido reconstruida varias veces a lo largo de la historia, y su aspecto no es el original, pero su interior está en perfecto estado.
Por todo ello, Dublín es una ciudad imprescindible para visitar en Irlanda. En la capital del país podrá sumergirse de lleno en las tradiciones y las costumbres irlandesas.
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