Ayuthaya, Tailandia
Descubra la antigua capital del reino de Siam y uno de los lugares más mágicos del mundo: Ayuthaya, Tailandia. Desde esta ciudad se gobernó todo el sudeste asiático durante más de cuatro siglos. Hoy en día, las ruinas de esta, antaño esplendorosa urbe, están declaradas Patrimonio de la Humanidad, no solo por su belleza, también por su importancia histórica. Entre los templos de piedra y estupas que encontrará en Ayuthaya podrá reconstruir la historia más exótica de Tailandia.
Ayuthaya apenas está a 80 kilómetros de Bangkok, lo que lo convierte en uno de los destinos favoritos para ir de excursión desde la capital tailandesa. En el interior del recinto podrá alquilar un típico tuk-tuk o una bicicleta para recorrer los más de 15 kilómetros cuadrados del recinto, e ir de un monumento a otro para paladear la esencia de este mágico lugar.
En Ayuthaya, entre otros muchos lugares, podrá encontrar Wat Yai Chaimongkol, uno de los templos más conocidos de este paraíso arqueológico. La silueta de las estupas y las representaciones pétreas de Buda se han convertido en uno de los símbolos más reconocidos de este antiguo monasterio. Frente a este santuario encontrará una enorme estatua reclinada de Buda que no podrá dejar de fotografiar.
Por otro lado, en Wat Maha That encontrará una de las imágenes más famosas de Ayuthaya, Tailandia. De las ramas de los árboles surge una enigmática estatua de Buda sonriente, que parece puesta ahí a conciencia. Sin embargo, lo cierto es que las ramas de los árboles “engulleron” la imagen de Buda y, caprichosamente, solo quedo a la vista el rostro del santo. Sea como fuere, esta pintoresca imagen le maravillará.
Al descubrir Viharn Phra Mongkol Bophit le recordará al Palacio Real de Bangkok, en el que efectivamente está basado. Sin embargo, este templo se construyó únicamente para guardar una enorme estatua dorada de Buda sedente. Contemple sus más de 12 metros de altura y sus 9 metros de ancho para maravillarse con la majestuosidad de esta representación. Por otra parte, en Wat Phra Si Sanphet, descubrirá tres estupas que guardan las cenizas de los antiguos reyes siameses que gobernaron el continente desde esta ciudad.
Una vez haya visto todas las maravillas que ofrece Ayuthaya, Tailandia, que no son pocas, podrá volver a Bangkok, pero podrá hacerlo gracias a un crucero por el río Chao-Phraya, una de las mejores maneras de sumergirse en la cultura tailandesa. A medida que avanza por el cauce del río podrá contemplar el paisaje rural de Tailandia y decenas de pueblecitos pintorescos que conservan la esencia típica oriental, como si el tiempo no pasase entre sus cabañas.
Por si fuera poco, también podrá visitar el palacio de Bang Pa-In, una de las maravillas del país asiático. Hoy en día este fastuoso palacio es la residencia de verano del rey de Tailandia. Situado justo en la ribera del Chao-Phraya, ofrece una espectacular decoración exótica que poco, o nada, tiene que envidiar a la belleza de los antiguos edificios de Ayuthaya. Disfrute en Bang Pa-In de uno de los lugares más espectaculares de Tailandia.
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